Filete de pechuga en salsa de queso. Foto propia
La pechuga de pollo o de pavo suele estar poco jugosa, una forma espectacular de mejorarla es sumergirla en una suculenta salsa de queso. No solo le aporta untosidad y cremosidad, también le dota de los aromas y sabores del queso o quesos que hayamos elegido.
2 Comensales
pollo o gallina o pavo o pato o codorniz
250 Gramos
queso parmesano o emental o rallado
100 Gramos
Ajo o ajo tierno
1 Diente
cebolla o puerro o chalota o hinojo
1 Mitad
leche o nata o mantequilla
200 Mililitros
leche o nata o mantequilla
50 Mililitros
pimienta o guindilla, o pimentón picante
Al gusto
Vamos a usar pechuga pero podríamos usar también entremuslo o muslo deshuesado.
En una sartén con un poco de aceite los doramos por los dos lados a fuego fuerte para que quede jugoso por dentro (si los files de pechuga son finos no los llegamos a dorar porque se secaran).
Los reservamos.
Pelamos y cortamos pequeño el ajo y la cebolla o el puerro.
En la misma sartén ponemos un poco más de aceite y lo sofreímos, de esta manera lo que haya dejado en la sartén la carne al freír se disolverá en el sofrito con los jugos de la cebolla o el puerro.
Añadimos a la sartén la nata y la leche, echamos pimienta y añadimos el queso rayado.
Mezclamos y dejamos que funda el queso al comenzar a hervir, bajamos el fuego y dejamos cocer unos 5 minutos removiendo de vez en cuando.
Añadimos la carne y la dejamos cocer 3 minutos más.
También podemos no meter la carne en la salsa y sacarla para triturarla y ponerla en una salsera para servirla sobre la carne.
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